Nada iguala lo que sientes cuando ves sonreír a tus hijos. Para que tengan una boca sana debemos comenzar desde la infancia, fomentando el hábito de una correcta higiene para proteger los dientes de la enfermedad de las caries. Los consejos que brindan especialistas te servirán para ejercitar buenos hábitos.

Los odontólogos aconsejan que los niños incorporen la tarea cotidiana de lavarse los dientes desde pequeños. A los dos o tres años, junto con la mamá o el papá, le resultara mas divertido el ritual si les plantea como un juego de morisquetas frente al espejo antes de irse a dormir. A partir de los cuatro, ya pueden hacerlo solos, a la mañana, si están en casa, después del almuerzo, y a la noche. En cuanto al cepillo de dientes, debe ser de cabeza corta, cerdas blandas, rectangular y acorde a la edad. Las mas pastas más aconsejables son las de laboratorio, que contienen fúor.

Contra las Caries

Los avances odontológicos vienen librando una batalla sin cuartel contra la enfermedad de las caries y ésta ha disminuido notoriamente en adolescentes y adultos. Sin embargo, no sucede lo mismo con los menores de 5 años. Un informe reciente de la Universidad de Harvard, advierte que las caries en los niños entre los 2 y los 5 años han aumentado de 24 a 28 por ciento en los últimos años. La caries dental  es la destrucción progresiva de los tejidos duros del diente.  Las responsables de este mal son las sustancias ácidas elaboradas por las bacterias que constantemente se forman sobre los diente. El problema comienza por la placa, una capa pegajosa e invisible de bacterias dañinas. El azúcar, unido a la placa, forma ácidos. Y no es la cantidad de azúcar ingerida lo que daña, sino la frecuencia de su consumo. Por eso, para prevenir la aparición de caries, los odontólogos recomiendan:

• Respetar las cuatro comidas y evitar que los chicos coman galletas u otros alimentos fuera de horario.
• Reducir la ingesta de dulces. Por ejemplo, si tu hijo tiene cuatro caramelos, que los coma todos seguidos,  o dos y dos después de cada comida y luego, se lave los dientes. Si con el desayuno come galletas dulces, que a la tarde consuma algo salado.
• Si ingiere con la comida una bebida azucarada, el efecto es menos nocivo que si la bebe fuera de la comidas.
• Evita darle a tus hijos las golosinas mas adhesivas, como chicles, caramelos masticables o chupetines porque quedan en la boca durante mucho tiempo.
• No uses golosinas como premios o castigos
• No esperes a que haya algún problema para visitar al odontólogo. Realiza controles cada seis meses a partir de los tres años.

Aliados de los dientes

En la elección y preparación de las comidas, también puedes contribuir a la buena salud bucal de toda la familia:

• Los alimentos ricos en fibra –cereales integrales, legumbres, frutos secos, frutas y verduras- son los más adecuadas, ya que requieren una mayor tarea de masticación y  estimulan la producción de saliva, el neutralizador de la boca.
• Los derivados lácteos resultan igualmente  beneficiosos, al contribuir con el aporte del calcio, fósforo y vitamina D, nutrientes implicados en la remineralización de huesos y dientes. El magnesio es un mineral que también forma parte de la estructura mental y es abundante en los frutos secos.
• El queso es otro excelente aliado: libera de inmediato calcio que se mezcla con la placa y  se pega a los dientes. Esta mezcla pegajosa protege los dientes del ácido que origina la caries y facilita el restablecimiento del esmalte del diente en el acto.
• Antioxidantes tales como la vitamina C y otros nutrientes que se encuentran en frutas y verduras ayudan a proteger las encías y otros tejidos del daño celular y la infección bacteriana. Los estudios indican que la Baya de arándano evita la agrupación de las bacterias bucales antes que estas formen la tan dañina placa.
• El ácido fólico promueve una boca sana y fomenta el crecimiento celular.  Se encuentra en verduras de hojas verdes como la espinaca y también en la levadura de cerveza.